La agricultura en nuestro país ocupa una superficie de 30 millones de hectáreas. Es el cuarto país de la Unión Europea que más tierra dedica a la explotación de recursos del sector primario. Sin embargo, el sector de la agricultura es el sector económico que cuenta con peores recursos. Además de la maquinaria y la mano de obra humana, la tecnología poco ha podido aportar a su crecimiento. Es ahora, en el albor del siglo XXI, cuando la tecnología se pone de su parte y alimenta un sector del que depende el 2,7% del PIB español.
Más llamativo es el hecho de que la agricultura representaba el 11% de la economía española en los años 70.
Este es una de las principales causas de la España vaciada. El poco aporte económico, la vida sufrida y las pocas facilidades que representa la agricultura hace que en nuestro país aún se siga viviendo un constante goteo de éxodo rural. Quizás ya sea hora de mirar hacia el futuro del medio rural si queremos conservarlo.
Agricultura de precisión
Como hemos dicho, la agricultura, y en general el sector primario, es el menos interesante para la tecnología. Pero surgen iniciativas, empresas y proyectos que pueden ayudar a salvar las zonas más despobladas de nuestro país.
Imagina que eres un agricultor y que posees 500 hectáreas de terreno. Todo ese terreno debe ser sembrado, cuidado y luego recolectado en periodos de tiempo muy determinados. Efectivamente, es muchísimo trabajo.
Por suerte para ti, la agricultura de precisión ya está en nuestro país. ¿Habías oído hablar de empresas como Nax Solutions o Graniot?
Se trata de hacer la tarea más fácil al agricultor y, al mismo tiempo, facilitar las cosas a sociedades y naciones enteras.
Antes, comprobar cuánta agua necesitaban tus 500 hectáreas requería jornadas enteras de observación y otras tantas de acción. Hoy, y gracias a empresas como Graniot o Nax Solutions, puede llegar a ser solo de varios segundos. El tiempo que tardes en acceder al sistema y seleccionar el filtro que mide la cantidad de agua que reciben tus cultivos.
A su vez, el sistema de estas empresas también es capaz de usar su inteligencia artificial para hacer predicciones. Para un agricultor, lo más complicado es estimar el techo de gasto para cada uno de sus sectores. Pues, en una etapa muy temprana, no sabe por ciencia infusa ni por experiencia, cuánto va a producir. El software de estas aplicaciones es capaz de predecirlo.
También, y muy relacionado con el cielo sobre nuestras cabezas, pero no tan arriba, hay muchas empresas que se centran en los drones. Drones que sobrevuelen explotaciones agrarias y, a vista de pájaro, estiman el estado de los cultivos, ayudando a mejorar la producción y su cuidado.
Esta claro que la tecnología ha llegado al entorno agrario para quedarse. Y, quizás y en el mejor de los casos, este será el empujoncito que necesitaba la España vaciada para crecer.