El 12 de junio se celebra el Día Mundial del Doblaje, una fecha perfecta para reivindicar el importante papel de los dobladores en la industria audiovisual
«Nos hemos quedado sin serie porque con todo esto que está pasando no la pueden doblar». Eso fue lo que me dijeron mis tíos en una llamada de teléfono durante el confinamiento. El coronavirus hizo que todo se parara de golpe, también la industria del doblaje. A muchas series les tocaba estrenar temporada por esas fechas y algunas lo tuvieron que hacer sin tener la versión doblada por ese parón repentino. Mis tíos, como tanta gente, se quedaron sin poder disfrutar de su serie favorita durante los días de encierro: «No podemos verla porque no nos da tiempo a leer los subtítulos».
A principios de junio, los doblajes ya pudieron volver y muchas ficciones televisivas ya están estrenando los capítulos doblados. Pero la ausencia temporal del trabajo de los dobladores nos ha hecho ver que son una parte esencial en el proceso de producción de cualquier proyecto audiovisual. Sin su voz, las historias jamás llegarían a las personas que tienen dificultades para ver los contenidos en versión original.
Hoy, 12 de junio, se celebra el Día Mundial del Doblaje. Este año, más que nunca, los dobladores y todo el equipo que posibilita esa tarea deben ser homenajeados. Una buena forma de hacerlo es viendo este resumen del largometraje documental «VOCES EN IMÁGENES».
«VOCES EN IMÁGENES» celebra la labor de los profesionales del doblaje del cine español. En él, grandes figuras de esta profesión relatan sus experiencias. Entre ellos, por ejemplo, Ricardo Solans, quien da voz a Robert De Niro y que fue el responsable de aquel mítico «Abogado» en ‘El cabo del miedo’ (Martin Scorsesse, 1991). El documental defiende que para ser doblador, antes hay que ser actor. Por eso, muchos de los entrevistados niegan que su labor desvirtualice el trabajo original de los actores.
Piden más reconocimiento, pero como industria, no a nivel personal. No les importa pasar desapercibidos, todo lo contrario. «Como la finalidad profunda de nuestro trabajo es que se nos olvide, pues tampoco hay que extrañarnos que luego no se nos reconozca», apunta Miguel Ángel Jenner en el vídeo.
Puede que no reconozcamos sus rostros por la calle; pero sus voces, esas que tantas historias nos han acercado, se quedarán para siempre grabadas en nuestra memoria.
