El coche del futuro será totalmente eléctrico, con baterías de estado sólido, autónomo y muy importante: 100% reciclable. Esta es la propuesta que nos ofrece la marca BMW con su BMW i Vision Circular, un automóvil que ya no se centra en las prestaciones, velocidad o potencia a la hora de presentarse, sino en la sostenibilidad.
Con el anuncio del fin de la venta de coches con motor de combustión en 2035, BMW ha comenzado a trabajar en su propuesta para 2040. En estos momentos, los automóviles BMW ya cuentan con un 30% de materiales reciclados y pretenden aumentar la cifra al 50% durante los próximos años, buscando convertirse en la marca de automóviles más sostenible del mercado (según palabras de Oliver Zipse, CEO de la empresa alemana).
La carrocería de este automóvil está confeccionada con materiales sin pintar, “de esta manera, pueden volver nuevamente al ciclo” y volver a reciclarse en su totalidad, declaró Adrian Van Hooydonk, jefe de diseño de BMW.
A su vez, en su interior no encontramos cromo ni cuero como suele ser habitual, sino materiales reciclables, fácilmente separables y totalmente reutilizables. No hay decoraciones ni dobles marcos, y las uniones solo llevan tornillos y conectores, ya que “evitar los materiales de unión es muy importante para que las partes del coche puedan separarse fácilmente y reutilizarse”.
Esta decisión de un coche 100% reciclable no se trata únicamente de conciencia medioambiental, sino que también viene favorecida por la escasez de materias primas, que cada vez son más escasas y costosas para producir nuevos modelos.
BMW espera que este modelo forme parte del paisaje urbano en 2040, en un entorno donde se espera que todas las empresas cojan la misma dirección desde ahora y, esperemos, la mayoría de los automóviles sean 100% sostenibles antes de 2050.
