Europa apuesta por la bicicleta para lograr un futuro sostenible. La creación del primer Plan Director Paneuropeo para el Fomento de la Bicicleta avala su impulso en el continente. El programa se aprobó el pasado 18 de mayo, en el que se incluyen varios puntos interesantes tanto a nivel nacional como a nivel local.
La bicicleta, vehículo necesario
El Plan Director tiene como objetivo cercano 2030. Este programa está diseñado para realizarse tanto en ámbito nacional como regional. Cuenta con siete metas clave:
- Aumentar el uso de la bicicleta en la región indicada.
- Promover un área segura a favor de la movilidad activa
- Expandir e innovar la infraestructura ciclista.
- Diseñar y utilizar políticas, planes, estrategias y proyectos nacionales para el uso de la bicicleta.
- Expandir la seguridad de los ciclistas, logrando así reducir el número de víctimas mortales y de lesiones.
- Adaptar el uso de la bicicleta en las políticas sanitarias.
- Añadir el uso de la bicicleta y la infraestructura ciclista en la planificación del uso del suelo, así como de las infraestructuras urbanas, regionales y de transporte.
La importancia de este hito histórico para la comunidad internacional. Así lo ha explicado Leonore Gewessler, ministra federal de Acción Climática, Medio Ambiente, Energía, Movilidad, Innovación y Tecnología de Austria. “Es un hito histórico para Europa en el camino hacia un sistema de movilidad climáticamente neutro”, declaró.
Una guía útil para el ciudadano. Este nuevo programa aporta diversos beneficios a la sociedad. “El uso de la bicicleta aporta un triple beneficio a nuestras sociedades: el impulso de la economía local con más empleos verdes, el aumento de la salud de las personas y la protección activa de nuestro clima”, concluyó la política.
La pandemia ha potenciado el uso de bicicletas
Durante la pandemia producida por la Covid-19, se ha impulsado el uso de bicicletas a nivel europeo. Es por ello que los diferentes países han apoyado la iniciativa para fomentar la utilización de este tipo de transporte, el cual no es dañino con el medio ambiente. Este aumento de uso puede acelerar el progreso en varios Objetivos de Desarrollo Sostenible en la Agenda 2030.
Ejemplificando lo citado anteriormente, puede acelerar el progreso del Objetivo 3, relacionado con la salud y el bienestar. Además, puede crear puestos de trabajo, ayudando a la economía, algo planteado en el Objetivo 8. Finalmente, contribuye a descarbonizar la movilidad y no contaminar el aire, por lo que entraría en el Objetivo 13, dedicado a la acción por el clima.
11 grupos de recomendaciones
El objetivo principal es sacar el mayor rendimiento posible del transporte en bicicleta. A su vez, el Plan Director incluye 33 recomendaciones dentro de su guía, las cuales se encuentran clasificadas en 11 distintos grupos:
- Preparar y emplear planificaciones nacionales que potencien el uso de la bicicleta, los cuales están apoyados en proyectos nacionales que faciliten la utilización de la misma.
- Optimizar el marco legislativo para la difusión del uso de la bicicleta.
- Modelar una infraestructura ciclista de fácil uso para la ciudadanía.
- Suministrar inversiones razonables, a la vez que mecanismos de financiación eficaces.
- Incluir la bicicleta en los procesos de planificación y facilitar la multimodalidad entre transportes.
- Impulsar el uso de la bicicleta mediante estímulos, a la par que una mejor gestión de la movilidad.
- Mejorar la salud y seguridad para el uso de este transporte.
- Perfeccionar las estadísticas sobre su utilización para utilizarlas en un control. Tras ello, se pueden realizar comparativas eficientes.
- Fomentar el cicloturismo.
- Utilizar las nuevas tecnologías adaptadas a la bicicleta y la innovación.
- Apoyar su uso para un sistema de transporte más resistente.
