Investigadores de la Universidad de Georgia han descubierto murciélagos fluorescentes, un hallazgo que llega justo a tiempo para Halloween 2025. Estas especies emiten una luz verde brillante bajo rayos ultravioleta, un fenómeno tan enigmático como fascinante que ha sorprendido a la comunidad científica.
El equipo liderado por la bióloga Sarah Gaudet detectó el fenómeno por casualidad mientras analizaba piel y pelaje de murciélagos norteamericanos en estudios sobre conservación. Bajo luz normal, los animales mantienen su color habitual, pero al recibir rayos UV sus alas y rostros reflejan una tonalidad verde fosforescente, similar a la bioluminiscencia marina. Lo más sorprendente es que el efecto varía según la especie, el sexo e incluso el área del cuerpo iluminada.
Un misterio bioquímico por resolver
Hasta ahora, la fluorescencia en mamíferos era un rasgo excepcional documentado solo en el ornitorrinco, algunas zarigüeyas y roedores australianos. Verlo ahora en murciélagos abre una nueva línea de investigación sobre su función y origen evolutivo. Los científicos sospechan que el fenómeno podría deberse a moléculas de colágeno y queratina presentes en el tejido de las alas, que actúan como filtros naturales al reflejar luz ultravioleta.
Gaudet explica que el equipo se encuentra analizando muestras en laboratorio para determinar si este resplandor cumple un papel biológico. Podría servir para comunicarse entre individuos, reconocer parejas o protegerse de depredadores, aunque por ahora no existe evidencia definitiva. “La naturaleza siempre tiene una forma de sorprendernos”, señaló. “Estos destellos invisibles al ojo humano podrían tener un propósito ecológico aún desconocido, quizá relacionado con la orientación o el apareamiento”.
De curiosidad científica a herramienta de conservación
El hallazgo ha despertado el interés de organizaciones dedicadas a la protección de los murciélagos, especialmente en América del Norte, donde varias especies enfrentan graves amenazas por el síndrome de la nariz blanca, una enfermedad fúngica que ha diezmado poblaciones enteras. Comprender los mecanismos que producen esta fluorescencia podría servir para detectar individuos en colonias nocturnas sin perturbar su descanso, facilitando su monitoreo y cuidado.
Los investigadores también destacan el valor educativo del descubrimiento. Mostrar la belleza invisible de los murciélagos ayuda a cambiar la percepción pública de estos animales, a menudo temidos o incomprendidos. En lugar de símbolos de oscuridad, se revelan como seres complejos, esenciales para los ecosistemas y portadores de una luz que solo la ciencia puede mostrar.
El brillo invisible de la vida nocturna
El estudio, que continúa en colaboración con universidades de Texas y Canadá, busca ahora comprobar si otras especies tropicales presentan efectos similares. Si se confirma, la fluorescencia podría considerarse una adaptación evolutiva más común de lo que se creía, quizá relacionada con la capacidad de algunos mamíferos para ver luz ultravioleta.
Lejos de ser un “truco de Halloween”, los murciélagos fluorescentes recuerdan que la biología aún guarda secretos luminosos. Su resplandor, imperceptible sin la ayuda de la ciencia, simboliza la luz del conocimiento que se abre paso entre los misterios de la naturaleza. En una época marcada por la pérdida de biodiversidad, este hallazgo es también un recordatorio de que el asombro sigue siendo una forma de conservación.
Ni vampiros ni leyendas: este año, los verdaderos protagonistas del Halloween son los murciélagos fluorescentes que brillan de verdad.
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Fuente: EarthSky – Bats that shine in the dark are nature’s Halloween surprise (27 octubre 2025). https://earthsky.org/earth/bats-that-shine-in-the-dark-ultraviolet-light/
