La entidad multinacional de Nestlé se ha comprometido desde hace varios años con el medio ambiente y el desarrollo sostenible. Ahora, en su nuevo proyecto, pretenden conseguir cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para el año 2050. A su vez, se busca impulsar la energía verde.
Este aumento de la energía renovable se llevará a cabo en colaboración con la empresa Bioenergy Ibérica, experta en servicios energéticos. La entidad ha instalado una caldera de biomasa en la fábrica de chocolates de Nestlé, situada en La Penilla de Cayón (Cantabria).
Nestlé utiliza el cacao como materia prima
Esta nueva caldera tendrá como propósito utilizar la cáscara de cacao como materia prima para la obtención de vapor. Ello se realizará mediante el proceso de torrefacción del mismo. De esta forma, debido a su gran fuerza calorífica, la cáscara se convertirá en biocombustible.
Además, como resultado del procedimiento, se impulsa la economía circular, ya que este vapor se utilizará posteriormente en el proceso de tostado del cacao. La mencionada caldera entrará en funcionamiento en el primer semestre del próximo año. Esto generará cerca de 12.500 toneladas de vapor al año. Ello supone un 10% del vapor total producido.
Acción complementaria a otros proyectos
En cuanto al CO2, , se reducirán casi 2.500 toneladas producidas anualmente tanto de forma directa como indirecta. Este proyecto se complementará con otros procesos de producción de energía verde que tiene la entidad multinacional, como puede ser la planta de cogeneración, en funcionamiento desde 1993.
A su vez, pueden recogerse resultados satisfactorios de las acciones realizadas por la empresa. El centro de producción cántabro ha disminuido en más de un 83% el uso de agua y en más de un 16% el consumo de energía. Además, se ha disminuido en casi un 8% las emisiones en kilogramos de CO2 por tonelada producida en el período comprendido entre 2011 y 2020.