El biocarbón favorece la recuperación de los suelos contaminados por metales pesados según un nuevo estudio elaborado por el CISC.
Los implicados en este estudio son el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla (Irnas-CSIC). El resultado podría ser un gran paso a la hora de solucionar la problemática de la contaminación por metales pesados.
De esta forma se ha demostrado la efectividad del biochar o biocarbón en la recuperación de estos suelos.
¿Por qué el carbón podría ser la solución a los suelos contaminados por metales pesados?
El biocarbón es un producto sólido obtenido mediante transformación térmica de la biomasa, muy resistente a la biodegradación. Es similar al carbón vegetal pero con un rendimiento mucho más alto y una estructura microporosa.
Los resultados de este estudio muestran que el carbón, gracias a estas características, disminuye la movilidad y biodisponibilidad de contaminantes evitando que se distribuyan por el medio ambiente.
Para llevar a cabo este estudio, se aplicó el biocarbón en suelos ácidos contaminados por metales pesados y se analizó el efecto que causó en la composición de la materia orgánica preexistente.
Este estudio ha sido publicado en la revista International Journal of Environmental Research and Public Health. Se llevó a cabo en 12 parcelas del Corredor Verde del Guadiamar, en el suroeste de España, que presentaban niveles de contaminación moderados o altos por metales pesados.
Huesos de aceituna y cáscaras de arroz son los materiales utilizados para preparar este biocarbón que, tras 22 meses de haberlo aplicado, genera un aumento de la capacidad de retención de agua del suelo y permanece estable en el suelo en forma de partículas insolubles para todos los valores de pH.
Por tanto, el biocarbón podría ser una gran herramienta para conseguir revertir los efectos de la contaminación en nuestros suelos.