¿Imaginas no tener residuos en el lugar dónde vives? Parece imposible, pero la isla de Tilos, en Grecia, ha demostrado que puede conseguirse, aunque a pequeña escala.
Tilos, ubicada en pleno Mar Egeo, se ha convertido en la primera isla del mundo en implementar el programa de basura cero (Zero Waste) y de reutilización de materiales que, normalmente, desecharíamos como residuo.
Vivir sin residuos
El movimiento residuo cero consiste en reutilizar los productos para que no vuelvan a la naturaleza. Toda la basura de la isla se recoge puerta por puerta y se gestiona para eliminar la huella medioambiental.
La travesía hacia este modelo sostenible comenzó en Tilos en el año 2021, cuando las autoridades locales tomaron la decisión de convertirse en un ejemplo de sostenibilidad.
La iniciativa ‘Just Go Zero Tilos’ es un proyecto de Polygreen, una empresa que ofrece soluciones de economía circular, en conjunto con el ayuntamiento de la isla.
Para llevar a cabo el proyecto, Polygreen, ofreció a toda la población bolsas con el logo Just Go Zero Tilos y un folleto -creado con papel reciclado- para que los ciudadanos aprendiesen a clasificar sus desperdicios.
Al comienzo del proyecto los habitantes de la isla manifestaron resistencia a las nuevas medidas pero, gracias a la educación desde las escuelas y a la orientación de la empresa han conseguido cumplir el objetivo.
La desaparición de vertederos
En Tilos los vertederos y los contenedores de basura públicos han desaparecido. Los residuos se gestionaban en gran medida a través de ellos pero, el primer paso hacia una isla sostenible fue sustituirlos. En su lugar se implementó una planta de reciclaje, el Centro de Innovación Cíclica.
Cuando los restos llegan a la planta de reciclaje, se vuelven a clasificar según su tipo. Una parte de ellos, denominada biomasa, se destina a transformarse en energía y el resto, los biorresiduos, se compostan.
Además, para informar y mantener motivados a los ciudadanos, han creado una aplicación móvil, ‘Just Go Zero’, en la que reciben información en tiempo real sobre cuánto han reciclado.
Como resultado, un año después de fomentar la recogida selectiva casa por casa y de la gestión de restos orgánicos, las tasas de recuperación de desperdicios se sitúan en el 90%. De este modo, la isla sigue avanzando hacia un modelo de residuos cero marcado por la reutilización y la recuperación de recursos.
El futuro sostenible de Tilos
Tilos quiere continuar y mejorar sus prácticas de reciclaje, es por ello que ha implementado un plan de futuro. Con vistas a 2025, la isla quiere mantener la tasa de desviación de residuos en un 90%. Así mismo, pretende mantener la cifra de menos del 10% de generación de residuos municipales al año.
Por otro lado, se ha establecido el fomento y promoción de actividades de reutilización y upcycling, la prevención de la degradación del ecosistema y han puesto especial énfasis en una transición ecológica, tanto para los residentes de la isla como para los visitantes, según Panorama Griego.
Una isla verde desde 2017
Tilos posee una larga tradición ecologista. En el año 2017 comenzó su andadura hacia una ciudad sostenible con el proyecto de investigación europeo TILOS (Technology Innovation for the Local Scale).
Esta iniciativa ha convertido a la isla en la primera energéticamente independiente del Mediterráneo. Lo consiguió gracias a la instalación de una turbina eólica y de paneles solares, que abastecen con energías renovables a las más de 900 personas que llegan a residir allí.
Esta iniciativa no ha sido la única que ha convertido a Tilos en una isla verde, en 2017, ganó el premio ‘Energy Islands Award’, un galardón otorgado por la Unión Europea gracias a su innovación en energías renovables y su eficiencia energética.
El modelo de residuos cero que se ha implantado en la isla no solo beneficia al medio ambiente, ha supuesto una transformación en la infraestructura local y un avance en el estilo de vida de los residentes.
Tilos ha puesto la primera piedra hacia un mundo basado en las energías renovables.Desde Good4Good los animamos a seguir la línea con acciones individuales como ser más conscientes con el entorno, reutilizar productos y reciclar.
