Banksy se ha comprado un barco. Pero lo ha hecho con su habitual tono irónico. Como nuevo rico del mundo del arte, ha invertido sus millones en un barco con el que disfrutar de las turbulentas aguas del Mediterráneo. Entre sus intereses están: recorrer el mar de costa a costa ofreciendo asistencia a refugiados, acoger inmigrantes a la deriva a los que los gobiernos europeos obvian y ofrecer primeros auxilios a quien lo necesite sin importar lugar de nacimiento, color de piel o ideología.
El mundialmente conocido grafitero publicó en sus redes sociales que había adquirido un barco de la marina francesa para cruzar el Mediterráneo. Un barco que convirtió en un salvavidas con el que ayudar a afrontar la crisis humanitaria a la que nos enfrentamos. Para ayudar a mitigar la gran pérdida humana que sucede cada día en nuestro mar, en el mar de la Europa septentrional. Un mar que ha sido el origen de la vida de nuestra civilización y, a su vez, el escenario de la muerte de miles de personas en el pasado. Está en nuestras manos, en manos como las de Banksy y toda la gente que forma parte de la tripulación del M. V. Louise Michel, hacer que el Mediterráneo sea el origen de la vida y no la causa de la muerte.
Las redes
El M. V. Louise Michel tiene sus redes sociales activas. No las deja de lado, pues son un vehículo perfecto para mostrar todas sus hazañas, todas sus luchas y todos los rescates y asistencias humanitarias en las que interviene. Nadie puede decir lo contrario, pese a todos los pormenores que lastren las redes sociales, son un medio increíble para estar actualizado en todo momento. Para que conozcas la realidad y para que tus seguidores conozcan tu realidad.
Las redes del barco de salvamento nos hacen partícipes, si las seguimos, de todas las situaciones que viven. Nos muestran todos los dramas a los que asisten y todas las heroicidades que protagonizan. Su primer post fue realizado el 25 de agosto de 2020 y anunciaba que estaba listo para la acción y permanecería a la espera de cualquier situación de emergencia. Cualquiera que pasase “desapercibida” ante los gobiernos europeos. Por supuesto, como iba Banksy a desaprovechar una oportunidad de hacer crítica a la hipócrita sociedad en la que vivimos. Es una forma de crear conciencia, de hacer que todos nos demos cuenta de lo necesario que es que luchemos por el cambio positivo.
Desde el 25 de agosto de 2020, el M. V. Louise Michel ha realizado alrededor de 7 rescates marítimos salvando la vida de más de 350 personas.
Lamentablemente, a día de hoy, el barco está retenido en puerto. Su alegato en sus redes acusa directamente a los gobiernos europeos. No alude al origen del puerto en el que esté retenido, ni expone al país en concreto, pero sí habla de la Unión Europea como nación. Son las leyes europeas acerca de los barcos de rescate de entidad civil las que le retienen. Por tanto, es materia de todas las naciones europeas, de todos los europeos, de todos nosotros, acabar con algo tan injusto.
Con un rumbo fijo
Es increíble que exista necesidad de un vehículo civil y “casi artesanal” en las aguas más transitadas de la Unión Europea. Pero, efectivamente, la hay. Después de esta verdad incómoda, una acusación directa.
“Los estados europeos instruyen a sus guardacostas para no responder las llamadas de emergencia de los ‘no europeos’ dejando, así, que se ahoguen desesperados en el mar.»
Manifiesto del M. V. Louise Michel
Además, para complicar más las cosas, esas mismas autoridades, detienen, previenen y arrestan a las tripulaciones de los que solo quieren ayudar.
Por si fuera poco, la Covid-19. La pandemia mundial no ha hecho más que complicar las cosas. Obviamente, toda persona que se sube al M. V. Louise Michel es analizada médicamente con el objetivo de encontrar síntomas de Coronavirus. Si los da, no se le echa por la borda. Se le separa del grupo y se le aísla para evitar la transmisión.
La misión de la tripulación y el motivo por el que el barco nació es asistir a todo el que lo necesite, sin prejuicios, sin distinciones. Aseguran ser personas donde las nacionalidades no importan, donde no existen diferencias de trato. Su objetivo es aplicar estos valores en un mundo lleno de prejuicios y miedos y, a ser posibles, transmitírselos al mundo. Porque, como aseguran, zarpan atendiendo a cualquier llamada de socorro, cualquiera. No solo para salvar sus almas, si no también para salvar las almas de todos nosotros.
Si estás interesado en arrimar el hombro puedes aportar en su web. También puedes contribuir y formar parte de Good4Good. Así te sumarás al cambio positivo.