España se convierte en el tercer país de Europa en crear una ley para hacer frente a una problemática que afecta no solo a consumidores, sino a restaurantes y empresas: el desperdicio de comida.
¿En qué consiste esta nueva ley?
Este proyecto de Ley de Prevención de las Pérdidas y el Desperdicio Alimentario, fomentado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, pretende reducir un 20% los desperdicios de comida.
Fue aprobado este mes de junio y no sólo afectará a los hogares, sino a restaurantes, hoteles, etc.
Para ello, se pretende realizar un plan de acción en todos los sectores para hacer frente a los 31 kg de media que tira una persona de forma anual.
Esta ley ya comenzó su tramitación parlamentaria y ha sido impulsada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, de esta forma España se convertirá, junto a Francia e Italia, en uno de los tres países en contar con esta medida.
Con esta ley, se han establecido tres niveles de desperdicios, y en función del nivel, tres líneas de actuación.
En primer lugar, los alimentos que estén en estado óptimo de consumo humano, se intentará darle otra salida, con donaciones a ONGs o comedores sociales, aplicaciones mediante las que puedes comprar las sobras de los restaurantes por un precio menor, etc.
En segundo nivel o vía de actuación será aquellos alimentos que puedan aprovecharse para transformarlo en otros productos comestibles como mermeladas, zumos, etc.
Y por último, aquellos desperdicios que no se puedan consumir por humanos, se destinarán a consumo animal siempre que estén en condiciones óptimas. Por el contrario, si esto no es posible, se podrán
¿Qué sanciones se impondrán si no se cumple esta ley?
Se establece como una infracción leve aspectos como no respetar la jerarquía de alimentos que hemos comentado anteriormente, la negativa a colaborar en la cuantificación de los desperdicios, que las ONGs no repartan los alimentos o que haya algún tipo de discriminación a la hora de este reparto, etc.
Sin embargo, no contar con un plan de prevención de desperdicios será una falta grave y la sanción puede ser desde 2001 hasta los 60.000. Si esta infracción se repite, la multa podría ascender hasta los 500.000.
Esta ley podría ser el inicio de un cambio a la hora de gestionar la problemática actual de residuos. ¡Estamos a tiempo de generar un cambio!
