¡Está sano y a salvo! Hablamos del Topo dorado de Winton, una especie de roedor ciego que se creía extinto desde el año 1936. El animal ha sido visto recientemente en las dunas de arena de Sudáfrica, concretamente en una playa de Port Nolloth, en la costa occidental.
Así lo han anunciado desde el Proyecto Re:wild lost species formado por un grupo de conservacionistas y biólogos que se dedican a buscar animales perdidos. El redescubrimiento de la especie, en el que también ha participado Jessie, una perra border collie, les ha llevado finalmente dos años de trabajo.
EDNA, una tecnología pionera
Asimismo, la forma de encontrarlo es científicamente novedosa: lo han hecho mediante eDNA (enviromental DNA o ADN ambiental). Se trata de una técnica que recolecta células de la piel que los seres vivos mudan «mientras hacen sus vidas», han explicado los investigadores en su estudio publicado en la revista Biodiversity And Conservation.
Tras meses buscando alguna señal que los llevase hasta el paradero del topo dorado de Winton, los científicos dieron con las primeras huellas. Los rastros les han conducido hasta dos de estos animales, que se encontraban bajo la arena.
Según apuntan los encargados del proyecto, dar con el topo dorado de Winton fue un proceso complicado. Ya que, las madrigueras suelen ser inaccesibles y los túneles que construyen en la arena casi nunca son visibles. Hecho al que se suma que los topos tienen un oído extremadamente sensible y son capaces de detectar las vibraciones del suelo, lo que les permite evitar ser vistos y escapar.
El topo dorado de Winton: encontrado gracias a Jessie
Para dar con el ejemplar, tomaron una muestra de suelo cada vez que Jessie, entrenada para olfatear a este tipo de mamífero pequeño, se detenía en la arena. Posteriormente, el material ha sido examinado en busca de ADN ambiental.
Los topos pueden desplazarse sin dificultad por las dunas de arena debido a las secreciones aceitosas que lubrica su pelaje. Liberan moco, orina, heces y células de la piel, estos elementos han sido detectados y ,gracias a ello, han encontrado al animal tras más de 80 años en los que se creía extinto.
Ahora es uno de los animales más buscados
El topo dorado de Winton, identificado científicamente como Cryptochloris wintoni, es conocido por no tener ojos, su pelaje brillante y sus adaptaciones para sobrevivir en entornos desérticos. Ahora, al ser redescubierto, el animal es el undécimo de la ‘lista de especies perdidas más buscadas’ que publica Re:wild.
La noticia ha supuesto un emocionante giro para la comunidad científica y los amantes de la fauna. Además, ha avivado las esperanzas de preservación de especies en peligro. Los investigadores continúan trabajando para comprender mejor el hábitat y el comportamiento de estos topos, así como para establecer medidas de protección para su supervivencia.
La historia del topo dorado de Winton nos recuerda que, incluso cuando creemos conocer todas las especies que nos rodean, la naturaleza aún guarda secretos fascinantes. Este hallazgo no solo ofrece una segunda oportunidad para esta especie única, sino que también destaca la importancia de la preservación de la diversidad biológica en todo el mundo.